Tengo que reconocerlo: Cuanto más bajo caen ciertos artistas, más me gustan. Llamadme masoquista, mala persona o sencillamente cabrón, pero que algunos artistas toquen fondo les sirve para resurgir con más fuerza, de sus cenizas. Véase Britney, Paris, Lyndsay o Whitney...
Y es cuando están en lo más bajo, cuando más interesantes me parecen, porque es entonces cuando le echan narices a la cosa, se transforman y tiran ´palante´.
Pero hay una excepción que empieza a preocuparme. No podía ser otra que Amy Winehouse.
La chica sabe a ciencia cierta que si sigue por ese camino lo lleva crudo, pero ella dice: no, no, no...
La última (que no será la última) ha sido la de ponerse más pecho. Si, ya sabeis, implantes. Eso que se ponian todas y ahora se quitan todas.
Pues bien, la Winehouse, lejos de seguir modas ha decidido aumentarselos. Pero en lo que no ha contado esta mujer, es en comprarse ropa nueva para poder albergarlos.
Por supuesto, ahí había un paparazzi para inmortalizar el momento. Y por supuesto, si podía salir con cara de colocada, muchísimo mejor.
De modo que aquí os dejo plasmadas unas instantáneas sin desperdicio. O con todo el.
Aprovecho para reivindicar la NO-REHABILITACIÓN de la Winehouse. Así nos gustas más, Amy.
2 comentarios:
pobre niña yonki XD
jajajajaja Me encaaaaaaaaanta!!!
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